Muchos comentarios había escuchado acerca de este festival, pero nada de lo que me habían platicado me pudo anticipar la locura y frenesí que se viven los dos días de intensa actividad y mucha mucha fiesta.
De primera instancia, Awakenings parece un festival como cualquier otro de su nivel: muchos escenarios, un buen lineup y 80,000 personas ansiosas de fiestear. Pero es mucho más que eso: la gente que va a Awakenings, lo hace 100% por amor a la música. Todos y cada uno de los asistentes sabe qué hará en las 12 horas de cada día que dura el festival, y cada uno de nosotros sabe que tendrá que hacer sacrificios grandes por ver a quien realmente te gusta. Ligar entonces se convierte en una tarea mucho más comprometedora, ya que no por cualquiera comprometes tu horario por nadie más.
Mis expectativas fue encontrar mucho extranjero (es decir, gente no holandesa) pero, para mi sorpresa, predominan los locales por mucho. Por supuesto que hay argentinos, mexicanos, ingleses, alemanes pero, en un 80% fueron gente holandesa y, pese a esto, te sientes como parte del festival. La vibra que se siente desde que esperas en los shuttles es increíble. Mucha felicidad y mucha expectativa se sienten al abordar ese camión que tomará 25 minutos en llevarte a Spaarnwoude, un lugar en medio de la nada, rodeado de turbinas generadores de energía eólica y que, conforme vas entrando, te hace pensar en toda la magia que vivirás ahí.
La logística y la organización del evento están diseñadas para que sólo te preocupes por la música y los escenarios a donde irás. La entrada es muy rápida, los cateos son rápidos y sin mucho trámite, la comida es buena, hay muchos baños y sitios para cambiar tu dinero por tokens, que es la moneda que utilizas para comprar alimentos y bebidas. Aceptan tarjeta y efectivo, y los precios no sobrepasan los de cualquier otro festival europeo.
Parte de la magia del festival es que los DJs también saben lo especial del mismo, y que compiten contra lo mejor de la escena en los otros 8 escenarios, provocando que solo saquen lo mejor de ellos. Sumado a las multitudes sedientas de buena música, generan una de las mejores fiestas y de los mejores festivales en los que he estado en mi vida.
Tanto en los afters como en el festival, Awakenings es sin duda una de las mejores experiencias en música underground del mundo. La genialidad con la que se curan cada uno de los escenarios, la actitud de la gente que, pese a que son hard party people, no se atascan demasiado (el festival es muy exigente y no permite drogas duras), y la organización hacen que este festival sea una de las experiencias más maravillosas que nosotros, los amantes de escena underground, podamos experimentar en el mundo.